Dios es impalpable como una sombra y, al mismo tiempo, sólido como una roca
Dios es impalpable como una sombra y, al mismo tiempo, sólido como una roca. El Padre es eminentemente Misterio, y el misterio no se deja atrapar ni analizar. El misterio, simplemente, se acepta en silencio.
17 de febrero
El Sentido de la Vida – Padre Ignacio Larrañaga
