Dios no participa de nuestras impaciencias
Dios no participa de nuestras impaciencias, de nuestros miedos ni de nuestros instintos de castigo. Ha llegado la hora en que el silencio reemplazará al grito, el cariño a la amenaza y la misericordia a la justicia.
11 de junio
El Sentido de la Vida – Padre Ignacio Larrañaga
